En el mundo del deporte, las lesiones ocupan una de las mayores preocupaciones, y, consecuentemente, cómo abordarlas, e incluso evitarlas son temas estrella que se abordan dentro del sector.
Hoy os presentamos algunas impactantes cifras sobre las lesiones; desde las dos caras de la moneda: la del deportista y la del club.
Por una parte, los deportistas están sometidos a la presión constante de tener que dar su mejor versión en todo momento, tanto dentro como fuera del campo de juego. Realizan entrenamientos y actividades de alta intensidad que comprometen su condición física, debido a las sobrecargas y sobreesfuerzos musculares que suelen derivar en la aparición de lesiones. Sumando la cantidad de actividades diarias, de ocio y los eventos a los que tienen que asistir, se agrava más la situación ya que no cuentan con el suficiente tiempo para garantizar un adecuado descanso muscular y, con ello, las probabilidades de lesión son aún mayores.
Tras la Copa Mundial de la Fifa 2022 en Qatar FIFPRO, en cooperación con FOOTBALL BENCHMARK, publicó una revisión en la que se reflejan datos significativos. Entre ellos, destacamos el hecho de que un 44% de los jugadores entrevistados experimentó fatiga física, extrema o mayor que su carga de trabajo, en ese momento de la temporada. El 53% informó de alguna lesión o mostró preocupación por la posibilidad de lesionarse debido a la saturación del calendario. Y, el 20% sintió niveles muy elevados de fatiga mental y emocional.
El mismo documento, determinó que los tiempos de recuperación y reanudación tras un evento de este nivel son muy cortos. El 61% de los jugadores opina que deberían tener 14 días de recuperación tras el último partido. Sin embargo, casos como el de Kamil Glik que apenas tuvo 4 días de descanso o Abderrazak Hamdallah quien tuvo 5 días, sirven de ejemplo para saber qué ese dato queda muy lejos de la realidad.
Otro apunte relevante lo estudió en 2017 la empresa Runnea, quien publicó los resultados de una encuesta realizada a corredores en la que el 48,42% de ellos afirmaba haberse lesionado por sobrecarga muscular.
Sin embargo, y por otra parte; somos conscientes de que las lesiones en el mundo del deporte tienen también consecuencias nivel económico, tanto para él mismo como para el club deportivo al que pertenece. Traduciéndose en grandes pérdidas de dinero. Pues no sólo se trata de la inversión necesaria para el proceso de recuperación, sino también de la repercusión que puede tener la ausencia del deportista en el juego.
Por ejemplo, en términos financieros, en promedio durante las temporadas 2012/13 y 2017/18, un club de la English Premier League perdió por temporada £45 millones en costes relacionados con las lesiones. Actualmente y debido al incremento en los salarios y premios, esta cifra será significativamente mayor.
En el mundo del atletismo, un atleta que compite en la Diamond League puede ganar $10,000 por victoria en un evento de la serie y $30,000 por una victoria final. Dependiendo de la cantidad de eventos en los que participen, pueden ganar potencialmente más de $1 millón por temporada.
El tenis y el golf son deportes en los que el coste de las lesiones a niveles de élite, se mide en millones. Un golfista del top 50 de la PGA Tour puede ganar alrededor de $177,000 por evento, cantidad que puede perderse si este, se ve incapacitado para participar en la competición.
Ante estos datos, nace Onerzia, que propone introducir en el mercado un exoesqueleto de cadera semirrígido que asista al movimiento del tren inferior, facilitando la recuperación muscular tras situaciones de sobreesfuerzos. De esta manera, el usuario podrá seguir llevando a cabo las tareas y acciones que desee sin que ello suponga comprometer, la salud del músculo y de la articulación. Y, consecuentemente, retrasar la aparición de lesiones y mejorar el rendimiento.